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El Soho chilensis en una amplia radiografía del barrio rosa santiaguino, día a día más ondero y gay.
Caminar por José Miguel de la Barra es un agrado. Este epicentro cultural se caracteriza por estar emplazado en el centro cívico a solo minutos de importantes edificios gubernamentales, bancos, hoteles, restaurantes, etc. O sea podemos tener todo a la mano tan sólo con vivir acá.
El circuito comprende desde Ismael Valdés Vergara al norte, hacia el sur con Huérfanos, al este con Lastarria y al oeste con avenida Miraflores.
Estos límites son relativos ya que según las calles se extiende varias cuadras a la redonda.
Lo caracteriza su mixtura de la arquitectura clásica colonial (parisino) con la modernidad de sus edificios y locales con mucha onda, y con una preocupación por el diseño. El gay en Chile y en el mundo se ha caracterizado siempre por su gusto por la moda, lo trendy siempre ha sido su desvelo. Como somos aspiracionales miramos con ojos atónitos lo que pasa en grandes capitales tales como Londres, Paris, Nueva York, Barcelona, el emergente Tel Aviv entre un millar de capitales con un barrio gay organizado y establecido.
Café Concepto.
Canción recomendada: Hay Consuelo – Pier Bucci.
Comencé muy temprano mi recorrido, parto en Café Concepto, me siento en una de sus pequeñas mesitas de vidrio, traen la carta, le pido un Mokaccinno que aparece allí, se debe dejar en claro que no es económico.
Llega Fernando que es mi garzón, el mismo se presentó al sentarme en su mesa y me ofrece revistas mientras espero mi Mokaccinno, en el ambiente hay un aroma a café increíble, presuntuoso me observa el cartel que dice café Illy, esto significa que este local sólo se vende el café de esta marca reconocida por su calidad (hay mejores). Aún más presuntuoso, arribista y esnobista me parece el biselado de su vitrina en donde sale “CAFÉ CONCEPTO. PRAGA – MADRID – SANTIAGO” a caso si este café no estuviera en Praga, Madrid u otra capital del mundo no sería bueno, y he aquí mi primera victima de observación.
Andrés e Iván dos clientes que se sitúan muy cerca mío, muy bien vestidos, hablan de trabajo pero no se miran como si fueran compañeros de trabajo, piden té negro y unas galletas, en ese momento llegó por fin mí café que esperaba ya con anhelo, me ofreció medias lunas, propuesta que acepté con ansias ya tenía un poco de hambre. Al rato de hablar de negocios, que esté debe hacer su trabajo y el fulano no quiere ya que la secretaria del sotáno le cae pésimo entre miles de sabrosos cotorreos laborales dignos de Betty La Fea.
Llegan dos pitucas teteras con sus respectivas tazas con el logo del té auspiciante y además con un plato de galletas artesanales (no muy finas) sus comensales las celebran con sonrisas dándoles la bienvenida a su fin. Por perspectiva me quedaba a la vista Iván, el cual mientras yo me hacía el loco fingiendo que leía y revisaba mis correos me lanzaba miradas de reconocimiento. Sorbo a sorbo escuché que Kylie y Madonna serían sus destinos, que Bunker ya no era lo mismo y que la loca Juani estaba cada día más flaca.
En el rato que llevo aquí entraron más clientes todos de ellos gays y dos extranjeros las miradas van y vienen como si todos nos conociéramos y nos hiciéramos los locos fingiendo no habernos visto nunca (a más de alguno lo vi en un antro de perdición nocturno), miradas lascivas, indiferentes, despreciativas entre otro tipo de miradas son las del tipo que acá se cruzan.
Me retiro de acá, ya se acercan las 11 de la mañana y quiero seguir mi recorrido, dejo atrás el pequeñito café de piso de parquet vitrificado y mueblecitos que me recuerdan That´s 70 Show, ya empiezo a encontrar el significado cuando un amigo me llama y me pregunta donde estoy le respondo y me dice:
– ¿Anday buscando pareja?, el paseo de las barbies es especial para eso… A parte que es la vitrina para las locas que se creen regias para demostrar su poder adquisitivo.
Solté una carcajada por la frasecita, la conocía pero recordarla siempre me parece gracioso como nuestros congéneres hablan de este barriecito.
Ya con un poco de ánimo, por la carga de cafeína y chocolate que bebí hace unos momentos, me dirijo al museo, eje central de este sector. Hace calor, me pongo los lentes de sol y camino hacia mi destino. Gordos, flacos, altos, bajos, rubios y morenos son los que pasan junto a mí, todos con un caminar digno de pasarela.
Pavonearme por esta avenida me resultó divertido, más aún recordar que mi amigo la llama “el paseo de las barbies”. ¡Si yo ya me sentía Stacy Malibú por mi pelo oscuro!
Así, seguí mi andar casi sin tocar el suelo creyendo que el mundo estaba a mis pies y casi exhibiéndome a los demás. Cada paso me hacia pensar que los clientes de los diferentes locales me aplaudirían al llegar a la esquina como quien aplaude a una verdadera modelo.
MNBA
Canción Recomendada: Cumbiera Intelectual – Kevin Johansen.
Acá mi paso es más bajo perfil, pago mi entrada y entro al centro cultural de elite más reconocido de Chile. Sigo sintiendo miradas, pero acá son mas “piola”, la fauna es más variada niños, abuelitas, profesores. Pero imposible no encontrar “amiguis” acá me parecen mas doctos, intelectualoides, todos son expertos al parecer en arte o bien amantes tanto como yo de la sensibilidad artística de quién esté exponiendo.
Sonrisas y más sonrisas me llevé cuando miraba unos cuadros y cerca de mí un tipo me dice:
- Hola ¿Cómo estás?, comenta medio tímido
- Bien ¿y tú?, respondo esbozando una evidente sonrisa
- Lindo ¿no? , haciendo alusión al cuadro. Lo cual me causo más gracia de lo común.
Intercambiamos unas sonrisas, palabras pero me alejé olímpicamente ya que no andaba flirteando sino reporteando.
Ya siendo casi las una de las tarde me dio un poco de hambre nuevamente y quiero almorzar pero no sé donde en este barrio donde hay tanta oferta.
Salgo del MNBA hacia el sur donde están casi todas las tiendas, paso por el Psicosis pero me pareció dedicado a los tragos, tenían oferta gastronómica pero un quiche me sonaba fome.
Seguí avanzando y me encontré con:
VERACE
Canción Recomendada: Summer Sun – Koop.
La pizzería que ofrece masas a la piedra y una pirula carta de rellenos (palmitos, berros, ricotta, cammebert, rucula, etc.) súper mediterráneos, revisando internet después me di cuenta que este local, en el mundo hay muchas pizzerías en el mundo no sé si pertenezca a ellos o solo es alcance de nombre y volvemos al tema del comienzo ¿Será para figurar?, elegí una mesa afuera y me atendieron pronto.
En ese momento llega Criss, un amigo de años quién administra un café en Miraflores con Santo Domingo, se sienta y dice “yo te invito hace mil que no hablamos”, me pareció genial siempre es bueno que lo inviten a uno ¿o no?, me contaba de sus cosas, de las peleas con su jefa y bla, bla, bla. Comemos una rica pizza de rúcula y ricotta, en la mesa hay harto queso rallado (jamás fue parmesano), orégano y merkén (para que no digan que no somos localistas, a los gays también nos gusta lo picante pero si no estuviera de moda no estaría en la mesa).
Mucha gente nos observa, mí amigo es reconocido en el sector, trabajó años en la sucursal de Point Peluquerías, hoy en otra ubicación. No sé si es porque lo conocen o bien es su pelo rubio platinado bien amoicanado.
Terminamos nuestro almuerzo, con dos personas más en la mesa amigos de él, fumamos unos cigarros. Pese a que me ofrecieron helado artesanal me negué, sabía que cerca estaba el Emporio La Rosa y sus helados me fascinan, yo presto a seguir mi camino de visitas, cual cliente incógnito.
Me despido y me dicen “te vay a buscar webeo al Revelación”, me puse rojo y sonreí, sabía que significaba y no era muy decoroso para todos.
Quizás la vergüenza que me dio en ese momento no fue suficiente y partí camino a Revelación que solo estaba en la otra esquina, todos se preguntarán qué es el Revelación, el ciber café más conocido de la comunidad gay, abierto las 24 horas del día, son cabinas privadas tipo oficina en donde uno elige salón fumador o no, al parecer nada especial.
CIBERCAFÉ REVELACIÓN
Canción Recomendada: El templo del placer – EM 314 feat Lucybell, Canal Magdalena, Dracma.
Lo especial no está en que sea un ciber, si no lo que se da en ese lugar. Cabina 8 me dice el recepcionista al asignarme zona fumadores como le pedí al entrar, bajo al subterráneo muy oscuro y solo luces en las puertas que señalan el número de tu cabina, si es la primera vez que vienes te acompaña un asistente del supervisor, te indica el baño, el citófono (para hacer pedidos) y tu cabina, te entrega cenicero “limpio”. Me siento y se escucha Paulina Rubio a todo volumen “Sexy Dance” es la seleccionada para ambientar el subterráneo.
Qué hago ahí si tengo laptop y no necesito usar internet, en todos lados hay wifi. Vine para contarles del mítico “Messenger interno”, este mensajero está conectado con cada una de las cabinas del ciber incluso con el recepcionista al cual uno puede hacerle pedidos de café, sándwiches, condones, bebidas, etc.
Abro mi correo y de inmediato se inicia el temido mensajero, me avisa en una ventanita cabina 8 conectada, veo la lista de conectados y me encuentro con la sorpresa que ya muchos han personalizado su nick, unos dicen busco pasivo, moderno u otros que definitivamente dicen lo que hacen o sus dotes, el más “tímido” pone su nombre. Me habla la cabina 9, 12, 16 y me preguntan que onda, les sigo el juego un rato y me dicen si quiero ir a su cabina. Respondo con un NO, sigo viendo que hay en el PC, en el escritorio hay una carpeta que se llama Videos, encuentro una amplia gama de videos pornográficos separados por categorías (héteros, gays y lésbicos), urgé en ellas, vi unos segundos, me aburrí nuevamente, revise FB.
Me llega una invitación para ver cam, me da una risa y justo me llama una amiga que está cerca que nos juntaremos en Abarzua para tomar once, sigo con mi show por cam, el tipo semidesnudo se muestra sin pudor, y me pide lo mismo, al cual respondo que no ya que estoy haciendo un reportaje sobre este ciber y no ando en busca de sexo, se cortó la transmisión de imágenes, ya imaginaran por qué.
Estuve más de una hora en todo eso, llego a recepción y pido mi cuenta, $2000 pesos me dice el recepcionista, pensé por un flirteo ¿esto es lo que se paga?, me despido compro cigarros y salgo nuevamente a mi recorrido.
CAMINANDO
Canción recomendada: Vogue – Madonna.
Camino desde José Miguel de la Barra, llego a Merced y sigo al oriente por esta, donde estará mi amiga, paso por el Opera afamado restaurante francés, el único 5 tenedores en el sector, que en su parte superior está el Catedral resto bar reconocido por su nivel y buenas fiestas.
El edificio es maravilloso, construido a mediados del siglo pasado y restaurando por Larraín y Sahli, dueños hasta el año pasado de estos taquilleros locales.
Locales hindúes, pequeñas ferreterías, ópticas, Santiago del Valle Boutique (que siútico ¿no?), Teatro Ictus, pequeños cafés, dulcerías árabes, entre muchos más llegando casi a Lastarria se encuentra Abarzua, he ahí mi blonda amiga esperándome para tomar el té, se nos acerca un bombero pensé que era una colecta, pero no, era nuestro mesero.
Hace calor y reviso la carta me parecen todas iguales, este último más surtido en sándwiches, sin más rodeos elijo un sándwich de queso de cabra, jamón serrano, rucula y aceitunas, un deleite mediterráneo acompañado de las afamadas Socos de Manzana, son aguas minerales saborizadas con manzanas naturales. Mientras comemos converso con ella y vemos una seguidilla de personajes de televisión, estrellas o no, salen en TV, luego entra un actor, hoy diputado, es Álvaro Escobar que en la otra mesa lo maquillan, fotografían y entrevistan, al menos divise 12 personas de la TV y farandulilla criolla. Ya serán las 21:00 la mayoría de las tiendas cierra menos sus cafés y restaurantes.
Me es imposible creer que ya se me ha ido el día en este lugar, me quedo con ganas de más ya que no visité muchas de las tiendas fetiches de este barrio. Se me quedan en el tintero Bordel Accesorios, Olimpo boutique, librería Metales Pesados, Zoo Concept, Café de las Artes, Los chinos Gay (rico restaurante chino reconocido por su publico), Café Brainworks (es el más grande además de existir una tienda de de muebles design tan reiterados en los locales contiguos), Café Tomodashi (mítico por su rico chocolate caliente que al hundir la cuchara te encuentras con la barra aún no derretida), The Clinic; la tienda, Los onderos Opera – Catedral, Café del Parque y una decena de locales qué merecían mi visita pero por tiempo no fue posible.
Lo que repite en cada uno de ellos, es que esté barrio es la pasarela Gay Friendly más grande de Santiago, en donde ser gay no es sinónimo de censura ni discriminación, sino de oportunidades ya que este segmento ya está consolidado como un buen consumidor, de gustos caros y muy buen pagador.
Concuerdo con esta segmentación, aunque el gay no tenga donde vivir, tiene para costear un café por muy caro que sea éste. Sólo si se lo sirven con gusto y clase, somos capaces de pagar dobles cantidades sin chistar.
Justifico que aquí sea un lugar para poder flirtear tranquilo sin miedos a ser vistos y autocensurarse, si no existieran estos espacios, seguiría nuestra sociedad negándonos como ciudadanos con derecho. Dejando en claro que nosotros como gays somos en parte pretensión y exposición al querer figurar con gustos extravagantes o refinados a tal punto de caer en el esnobismo y arribismo a la vez.
Intrínsecamente en nuestras personalidades está la aspiración a demostrarle al otro que si podemos, estamos, comemos, usamos, vestimos. Mirando referentes mundiales.
- No todos somos iguales, viva la diferencia en el paseo de las barbies -
